sábado, 19 de noviembre de 2016


EL APARATO DIGESTIVO

INTRODUCCIÓN

El aparato digestivo se denomina a veces aparato gastrointestinal, pero ninguna de estas denominaciones describe completamente las funciones o componentes del mismo. Los órganos del aparato digestivo también producen factores de coagulación y hormonas que no tienen relación con la digestión, ayudan a eliminar sustancias tóxicas de la sangre y modifican químicamente (metabolizan) los fármacos.

La cavidad abdominal es el espacio que contiene los órganos digestivos. Está limitada por la pared abdominal en la parte anterior (compuesta por capas de piel, grasa, músculo y tejido conjuntivo), la columna vertebral en la posterior, el diafragma en la superior y los órganos pélvicos en la inferior. Está recubierta, al igual que la superficie externa de los órganos digestivos, por una membrana llamada peritonitis.



DESARROLLO






El sistema digestivo es el encargado de digerir los alimentos que tomamos, haciéndolos aptos para que puedan ser primero absorbidos y luego asimilados. El sistema digestivo comprende el tubo digestivo y las glándulas anejas. El tubo digestivo es un largo conducto que se extiende desde la boca, que es un orificio de entrada, hasta el ano, que es el orificio terminal o de salida de los residuos de la digestión.

EL APARATO DIGESTIVO ESTA FORMADO POR:


EL TUBO DIGESTIVO
En el tubo digestivo se distinguen la boca, la faringe, el esófago, el estómago, el intestino delgado y el intestino grueso.

LA CAVIDAD BUCAL
La boca es una cavidad en cuyo interior están la lengua y los dientes. La lengua es un órgano musculoso en el que reside el sentido del gusto. Los dientes son piezas duras encajadas en los orificios o alvéolos de los huesos mandibulares. La parte inferior del diente se llama raíz y la porción libre externa se llama corona, figurando entre ambas una zona llamada cuello. Existen tres clases de dientes; los incisivos, los caninos, los premolares y los molares. El hombre adulto posee treinta y dos dientes, dieciséis en cada mandíbula; cuatro incisivos, dos caninos, cuatro premolares y seis molares.

La boca aparece rodeada por unos pliegues de la piel, llamados labios. Dentro de la boca se encuentran los dientes cuya función es cortar, trocear y triturar los alimentos (digestión mecánica) En la boca encontramos también la lengua, que tiene una gran cantidad de papilas gustativas, cuya función es la de mezclar los alimentos y facilitar su tránsito hacia el esófago. En la cavidad bucal desembocan las glándulas salivales, que segregan saliva, cuyas funciones son:
·         actuar de lubricante
·         destruir parte de las bacterias ingeridas con los alimentos
·         comenzar la digestión química de los glúcidos mediante una enzima, la amilasa o ptialina, que rompe el almidón en maltosa.

LA SALIVA
Está formada, en un 95% por agua y el 5% restante por solutos tales como iones sodio, potasio, cloruro, bicarbonato y fosfatos. Hay además una sustancia serosa llamada mucus y dos enzimas: La amilasa salival y la lisozima
Dientes

Estructuras duras, calcificadas, sujetas al maxilar superior e inferior de los vertebrados y algunos animales inferiores, cuya actividad principal es la masticación. En algunos animales los dientes tienen también otras funciones, como roer, cavar o ser utilizados en la lucha. En el curso de la evolución se han desarrollado distintas formas de dientes, desde las simples hileras escalonadas de dientes cónicos que poseen los tiburones hasta las estructuras más complejas habituales en los mamíferos.


                                                                            
                                                                             LA FARINGE

La faringe es una cavidad músculo-membranosa situada en el fondo de la boca y con la cual comunica. La faringe comunica a su vez con las fosas nasales mediante dos orificios, llamados coanas, y con el oído medio mediante las trompas de Eustaquio.
En el hombre mide unos 13 cm y queda delante de la columna vertebral. Alberga las amígdalas y, en los niños, los ganglios adenoides. Como arranca de la parte posterior de la cavidad nasal, su extremo más alto se llama nasofaringe. La inferior u orofaringe ocupa la zona posterior de la boca. Termina en la epiglotis, un pliegue cartilaginoso que impide la entrada de alimentos en la tráquea, pero no obstaculiza su paso al esófago. Las llamadas trompas de Eustaquio comunican la faringe con el oído medio y equilibran la presión del aire a ambos lados del tímpano. La faringe es un tubo muscular que comunica el aparato digestivo con el respiratorio. Para que las vías respiratorias permanezcan cerradas durante la deglución, se forma en la faringe un repliegue, llamado epiglotis , que obstruye la glotis. De esta forma se impide que el alimento se introduzca en el sistema respiratorio.
Al tragar comida esta abandona la boca y viaja por la faringe o garganta para entrar en el esófago.




 EL ESÓFAGO


  El esófago es un tubo que va desde la faringe hasta el estómago. Desciende verticalmente entre la tráquea y la columna vertebral, atraviesa el diafragma y comunica con el estómago por un orificio llamado cardias. El estómago es un ensanchamiento del tubo digestivo en forma de fuelle de gaita alargada.



EL ESTÓMAGO

El estómago está situado debajo del diafragma. En la pared del estómago hay fibras musculares lisas, oblicuas, longitudinales y circulares, y su interior no es liso, sino que presenta arrugas y pliegues. Además está tapizado por una túnica mucosa en la que están instaladas las glándulas encargadas de segregar el jugo gástrico.
. Se ubica a la izquierda del organismo, en la zona superior del abdomen, y presenta forma de saco redondeado en su parte más alta, aplanada en la porción media y cónica en la terminal. Tiene dos orificios: el cardias, que lo comunica con el esófago, y el píloro, que lo une al intestino delgado. Las paredes del estómago son musculosas y su interior se encuentra revestido de numerosas glándulas gástricas que segregan ácido clorhídrico y enzimas (proteínas cuya presencia hace aumentar la velocidad de las reacciones químicas). La función de tales sustancias consiste en favorecer la digestión de los alimentos y hacer que éstos adquieran consistencia líquida, para pasar a continuación al intestino delgado.














EL  INTESTINO

El intestino es un tubo de unos ocho metros de longitud situado a continuación del estómago. En él se distinguen el intestino delgado y el intestino grueso.



 El intestino delgado 
se halla a continuación del estómago y comprende el duodeno, el yeyuno y el íleon. En el interior del intestino delgado existen multitud de salientes de un milímetro de longitud, las vellosidades intestinales. En estas vellosidades circula la sangre por una arteriola y una venita, y la linfa por un pequeño vaso llamado vaso quilífero.










                                                                               El intestino grueso
 Comprende tres regiones: el ciego, el colon y el recto. El ciego es la primera parte y se une al intestino delgado por la válvula íleco-cecal. El ciego lleva una prolongación lateral, el apéndice vermiforme. El colon comprende una porción ascendente, una porción transversal y una porción descendente que termina en el recto, que se comunica con el exterior por el ano, por donde son expulsados los excrementos.



LAS GLÁNDULAS ANEJAS

Dentro de las glándulas anejas se distinguen las glándulas salivares, el hígado y el páncreas, que elaboran, respectivamente, la saliva, la bilis y el jugo pancreático. Las glándulas salivares se clasifican en tres pares: dos parótidas, dos submaxilares y dos sublinguales.
El hígado es la glándula más voluminosa del cuerpo humano. Está situado debajo del diafragma, en la región abdominal derecha, cubriendo algo al estómago. Del hígado sale la bilis por el conducto hepático.

 El páncreas elabora el jugo pancreático. Es un órgano alargado situado detrás del estómago, cerca del duodeno. Posee un conducto que recoge el jugo pancreático elaborado en el interior de la glándula.

















EL PROCESO DE DIGESTIÓN







 1.-Comienza en la boca cuando el individuo mastica y traga el alimento. Por acción de las enzimas, el alimento se descompone en partes más pequeñas y se transforma en bolo alimenticio. A partir de entonces el proceso se vuelve involuntario, es decir, el individuo no lo controla.

2. – El bolo pasa por la faringe y el esófago, cuyos músculos lo hacen llegar hasta el estómago.
3. – Una vez en la cavidad estomacal, el bolo se mezcla con los jugos digestivos que emanan de la mucosa estomacal. El material se descompone física (por los movimientos) y químicamente (como resultado de los jugos gástricos, plenos de ácido clorhídrico y pepsina). Las enzimas transforman el bolo en un semilíquido llamado quimo que desciende hacia el duodeno.
El bolo puede pasar en el estómago hasta unas 3 horas.
4.-En el duodeno se libera un moco que protege sus paredes del ácido del quimo. Este se mezcla con enzimas procedentes del páncreas y con la bilis producida por el hígado.
5. – El material es conducido hacia el resto del intestino delgado y la sangre absorbe los nutrientes. La bilis ayuda a digerir las grasas, y el jugo pancreático segrega enzimas digestivas. En este punto termina el proceso de digestión.

6.– El material sin nutrientes pasa al intestino grueso. En el ciego se recibe el material y de ahí pasa al colon, donde el agua se absorbe y el material se mezcla con millones de bacterias inofensivas así como células muertas, lo que forma las heces fecales.
En la etapa de segmentación, bandas de músculo del colon se contraen de forma longitudinal y separan las heces. La segunda etapa se caracteriza por contracciones peristálticas que empujan las heces hacia adelante. En la tercera etapa se producen ondas peristálticas que impulsan las heces hacia el recto.
7. – Las heces llegan hasta el recto, donde se almacenan para su expulsión.

8. – El ensanchamiento de las paredes del recto activa receptores que envía señales a la médula espinal, cuyas señales motoras ordenan la contracción de las paredes rectales para la liberación del material. Finalmente, las heces fecales se expulsan por el ano.

DOCUMENTAL 


ENFERMEDADES DEL APARATO DIGESTIVO


ENFERMEDADES DE LA BOCA

La boca es el principio del tracto digestivo. Los dientes y las glándulas salivales ayudan a descomponer los alimentos para ser digeridos y las amígdalas protegen al organismo contra infecciones. Existen varios vínculos entre la salud bucal y la nutrición. Así como las enfermedades bucales pueden afectar la dieta y la nutrición, las dietas y la nutrición pueden afectar el desarrollo y progreso de las enfermedades de la cavidad bucal.

 

Cáncer oral o bucal

Nombres alternativos: Cáncer de la boca; Cáncer bucal; Carcinoma bucal de células escamosas.
El cáncer oral o bucal compromete generalmente el tejido de los labios o la lengua y también puede ocurrir en el piso de la boca o en las glándulas salivales, en el revestimiento de las mejillas, las encías o el paladar (bóveda palatina). La mayoría de los cánceres orales lucen muy similares bajo el microscopio, son llamados carcinomas escamocelulares, son malignos y tienden a diseminarse rápidamente.
El hecho de fumar y otros usos del tabaco están asociados con un 70-80% de los casos de cáncer oral. El humo y el calor provenientes de cigarrillos, cigarros y pipas irritan las membranas mucosas de la boca. El uso de tabaco para mascar o rapé causa irritación debido al contacto directo con las membranas mucosas. El consumo de alcohol en exceso es otra actividad de alto riesgo asociada con el cáncer oral. Algunos casos de cáncer oral se inician como leucoplasia o úlceras bucales. El cáncer oral representa aproximadamente el 8% de todos los tumores malignos y los hombres se ven afectados dos veces más que las mujeres, en particular aquellos mayores de 40 años de edad.



ENFERMEDADES DEL ESÓFAGO


El esófago es el tubo que transporta alimentos, líquidos y saliva desde la boca al estómago.
El problema más común con el esófago es la enfermedad por reflujo gastroesofágico (GERD, por sus siglas en inglés). Ocurre cuando un anillo muscular que se encuentra al final del esófago no cierra adecuadamente. Eso permite que el contenido del estómago vuelva o haga reflujo, hacia el esófago y lo irrite. Con el tiempo, la GERD puede causarle lesiones en el esófago. Otros problemas incluyen acidez y cáncer.
El tratamiento depende del problema. Algunas personas mejoran con medicinas sin receta médica o con cambios en la dieta. Otras, pueden necesitar medicinas con receta o cirugía.
Cáncer Esofágico: Es un tumor maligno (canceroso) del esófago, el tubo muscular que transporta el alimento desde la boca hasta estómago.
El cáncer esofágico se presenta con mayor frecuencia en hombres mayores de 50 años y afecta a menos de 5 personas por cada 100.000. Se clasifica en dos tipos: carcinoma escamoso y adenocarcinoma. Los dos tipos lucen diferentes el uno del otro bajo el microscopio
El cáncer escamoso está asociado con el tabaquismo y el consumo de alcohol. La incidencia de esta enfermedad ha permanecido relativamente constante, mientras que la incidencia del adenocarcinoma del esófago ha aumentado en forma considerable.

El esófago de Barrett, una complicación de la enfermedad del reflujo gastroesofágico (GERD), es un factor de riesgo para el desarrollo del adenocarcinoma del esófago.


ENFERMEDADES DEL ESTOMAGO

El Cáncer de Estómago o Cáncer Gástrico: Es un tipo de crecimiento tisular maligno producido por la proliferación contigua de células anormales con capacidad de invasión y destrucción de otros tejidos y órganos, en particular el esófago y el intestino delgado, causando cerca de un millón de muertes en el mundo anualmente. En las formas metastásicas, las células tumorales pueden infiltrar los vasos linfáticos de los tejidos, diseminarse a los ganglios linfáticos y, sobrepasando esta barrera, penetrar en la circulación sanguínea, después de lo cual queda abierto virtualmente el camino a cualquier órgano del cuerpo.

Tipos de cánceres en el estómago


Adenocarcinoma; Aproximadamente entre 90% y 95% de los tumores cancerosos (malignos) del estómago son adenocarcinomas. Los términos cáncer del estómago o cáncer gástrico casi siempre se refieren al adenocarcinoma. Este cáncer se origina en las células que forman la capa más interna de la mucosa del estómago.
A continuación veremos otros tumores menos comunes que también se pueden detectar en el estómago:





Linfoma

Se refiere a los tumores cancerosos del sistema inmunológico que algunas veces se detectan en la pared del estómago. Éstos son responsables de aproximadamente 4% de los cánceres del estómago. El pronóstico y el tratamiento dependen de si el linfoma es agresivo o es un linfoma MALT de crecimiento lento. Para obtener más información, consulte el documento sobre linfoma no-Hodgkin de la Sociedad Americana del Cáncer.

Tumores del estroma gastrointestinal

Estos tumores son poco comunes que parecen originarse de las células de la pared del estómago llamadas células intersticiales de Cajal. Algunos son no cancerosos (benignos), mientras que otros son cancerosos. Aunque estos cánceres no pueden ser encontrados en ningún lugar del tracto digestivo, la mayoría (70%) ocurre en el estómago. Si desea más información al respecto, consulte el documento “Tumores del estroma gastrointestinal” de la Sociedad Americana del Cáncer.

Tumores carcinoides

Éstos son tumores que se originan de células productoras de hormona del estómago. La mayoría de éstos no se propaga a otros órganos. Los tumores carcinoides son responsables de aproximadamente 3% de los tumores cancerosos del estómago.
Úlcera Gastroduodenal: Las úlceras son heridas que se producen en la mucosa del estómago o el duodeno, a raíz de un aumento de las secreciones gástricas estimuladas por tensiones nerviosas, bebidas alcohólicas, ajetreo de la vida moderna y comidas abundantes o condimentadas.



ENFERMEDADES DEL INTESTINO DELGADO



Son cinco los tipos de cáncer del intestino delgado. Los tipos de cáncer que se encuentran en el intestino delgado son; adenocarcinoma, sarcoma, tumores carcinoides, tumor estromal gastrointestinal y linfoma. Veremos el adenocarcinoma y el leiomiosarcoma (un tipo de sarcoma).
El Adenocarcinoma: Se origina en las células glandulares del recubrimiento del intestino delgado y es el tipo más común de cáncer del intestino delgado. La mayoría de estos tumores afectan la sección del intestino delgado próxima al estómago. Suelen crecer y bloquear el intestino.

El Leiomiosarcoma: Se inicia en las células musculares lisas del intestino delgado. En su mayoría, estos tumores se manifiestan en la sección del intestino delgado próxima al intestino grueso.


ENFERMEDADES DEL INTESTINO GRUESO


Colon Irritable: Es un trastorno de consulta muy frecuente en la actualidad. Consiste en una alteración motora del tubo digestivo como resultado de cuadros tensiónales, angustia y estrés. Se caracteriza por dolor o malestar abdominal que habitualmente se alivia después de las defecaciones, y que es más frecuentemente percibido en la parte inferior izquierda del abdomen, e incluso, en algunos, casos irradiados hacia la espalda. Hay alteraciones en el hábito intestinal, pudiéndose presentar estreñimiento, diarrea o episodios alternados de ambos. Es usual además que se presenten deseos de evacuación intestinal después de comer, aumento en la producción de gases e hinchazón abdominal. Aunque no se conoce el origen específico de esta alteración en la motilidad digestiva, se relaciona estrechamente con el aumento del estrés.
Cáncer del Colon: El cáncer del colon o el recto también se conoce como cáncer colorrectal. Si se detecta anticipadamente, con frecuencia es curable. Es más común en las personas mayores de 50 años de edad y el riesgo aumenta con la edad. Se es más propenso a presentar un cáncer colorrectal si se tiene:
·         Pólipos: crecimientos de tejido dentro del colon y el recto que pueden tornarse cancerosos
·         Una dieta rica en grasas
·         Antecedentes familiares o personales de cáncer colorrectal

·         Colitis ulcerativa o enfermedad de Crohn


ENFERMEDADES DEL HÍGADO

  1. Hepatitis

El hígado ayuda al organismo a digerir los alimentos, almacenar energía y eliminar las toxinas. La hepatitis es la inflamación del hígado que impide su buen funcionamiento. Puede llevar a la escarificación, denominada cirrosis, o a un cáncer.
Los virus causan la mayoría de los casos de hepatitis. El tipo de hepatitis recibe su nombre de acuerdo con el virus que la produjo; por ejemplo, hepatitis A, hepatitis B o hepatitis C. El consumo de drogas o alcohol también puede provocar una hepatitis. En otros casos, el organismo ataca equivocadamente sus propios tejidos. Se puede ayudar a prevenir algunas formas virales mediante la vacunación. Algunas veces, la hepatitis desaparece espontáneamente. Si no sucede así, puede tratarse con fármacos. Algunas otras veces, la hepatitis dura toda la vida.
Algunas personas que tienen hepatitis no presentan síntomas. Otros pueden presentar:
·         Pérdida del apetito
·         Nausea y vómitos
·         Diarrea
·         Orina oscura y evacuaciones de coloración pálida
·         Dolor abdominal
·         Ictericia, tonalidad amarilla de la piel y los ojos

Cirrosis

La cirrosis es el conjunto de cicatrices en el hígado. El tejido cicatricial se forma por lesiones o enfermedades prolongadas. El tejido escamoso no puede hacer lo que hace el tejido hepático sano: producir proteínas, ayudar a combatir las infecciones, limpiar la sangre, ayudar a digerir los alimentos y almacenar energía. La cirrosis puede conducir a:
·         Ocurrencia de hematomas o hemorragias con facilidad o sangrado nasal
·         Hinchazón del abdomen o las piernas
·         Sensibilidad adicional a las medicinas
·         Aumento de la presión en la vena que penetra en el hígado
·         Venas dilatadas en el esófago y el estómago
·         Insuficiencia renal
La cirrosis puede tener muchas causas. Las causas más comunes son el alcoholismo crónico, la hepatitis, etc. Nada hará desaparecer el tejido escamoso, pero tratar la causa puede evitar que empeore la enfermedad. Si se forma demasiado tejido escamoso, es posible que quizá deba pensar en un trasplante de hígado.
Carcinoma hepatocelular
Aproximadamente 5 por ciento de las personas con cirrosis desarrolla cáncer de hígado.

Nombres Alternativos: Cáncer del hígado; Cáncer hepático; Carcinoma primario de las células del hígado; Tumor del hígado.


ENFERMEDADES DE LA VESÍCULA



Cálculos Biliares: La vesícula biliar es un órgano con forma de pera ubicado debajo del hígado. Almacena bilis, un líquido producido por el hígado para digerir las grasas. Cuando el estómago y el intestino digieren los alimentos, la vesícula biliar libera bilis a través de un tubo denominado conducto biliar común. Ese conducto conecta a la vesícula biliar y el hígado con el intestino delgado.
Es más probable que la vesícula cause problemas si algo obstruye el flujo de bilis a través de los conductos biliares. Eso suele ocurrir con los cálculos biliares. Los cálculos se forman cuando hay sustancias en la bilis que se endurecen. Las crisis por cálculos suelen presentarse después de las comidas. Los signos de una crisis por cálculos incluyen nauseas, vómitos o dolor en el abdomen, la espalda o debajo del brazo derecho.
Los cálculos biliares son más comunes entre los adultos mayores, las mujeres, las personas con sobrepeso. El tratamiento más común es la remoción de la vesícula biliar. Afortunadamente, la vesícula biliar no es un órgano imprescindible para la vida. La bilis tiene otras vías para llegar al intestino delgado.

Peritonitis: Es la inflamación del peritoneo (una membrana que recubre la cavidad abdominal), por acción de bacterias patógenas provenientes de la ruptura del apéndice (apendicitis mal cuidada) o por la perforación del estómago.